Los franceses ya no se hablan, pero tendrán que hacerlo
Thierry Meyssan- Los resultados de la reciente elección presidencial y de la última elección legislativa debilitan tanto al ejecutivo como al poder legislativo y conforman un panorama político de es
Los resultados de la reciente elección presidencial y de la última elección legislativa debilitan tanto al ejecutivo como al poder legislativo y conforman un panorama político de estancamiento. Los electores han negado su apoyo al régimen y también se niegan a aceptar sus decisiones. Desde 2005, los franceses han venido señalando todo lo que rechazan mientras que sus dirigentes ignoraban sus reclamos. Todos saben lo que habría que hacer para restaurar el país pero la mayoría de la clase política sólo busca “tener razón” en vez de ponerse al servicio del pueblo.
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